Leiner Vargas Alfaro, Economista (Dr.).
El PLN no es la cúpula del partido, no es su directorio político.
La solución propuesta es borrar con el codo 70 años de historia y de compromiso con la democracia. Somos un Partido que embejece y cada vez tiene menos adeptos, pero cerrar el clud a nuestra sociedad no le ayuda a rejuvenecer o volver a ser el Partido que representa a las grandes mayorías.
La solución de nuestro Partido pasa por qué efectivamente se abran las puertas y ventanas y se permita a nuevos liderazgos formar parte de nuestra historia. Nuestro Partido debe regresar a una agenda programática fundada en el bien común. Una economía solidaria y sostenible que mejore su productividad en medio de un reencuentro con los trabajadores.
No creo que un candidato o candidata elegido por 4 gatos sea validado por lo que queda de nuestro Partido, por el contrario creará más ataques y división al interior de las bases. Tiene mucha razón Fernando Berrocal con sus palabras y los que han dicho no a esta decisión imprudente del Directorio político de nuestro querido y venido a menos PLN.
Más y no menos democracia es lo que necesitamos. Nuevos liderazgos qué comprendan la realidad histórica de nuestro país. Una gran agenda programática qué priorice el reencuentro con nuestras bases. Soy y seré un creyente de que el pueblo de Costa Rica nos permitirá ser gobierno otra vez cuando mire al Partido de su lado en las grandes luchas sociales por la vivienda digna, el empleo de calidad, servicios de salud y educación fortalecidos y universales, mejores condiciones para emprender, igualdad completa de género, combate frontal a la corrupción y al narcotráfico.
Todo lo anterior pasa por un gran acuerdo nacional para proteger nuestra institucionalidad y nuestra democracia. Amigos liberacionistas, digamos no a reducir nuestro Partido a un club de amigos, digamos no a perder el rumbo de lo que dirán nuestras bases, hagamos valer nuestra voz.
Costa Rica merece un nuevo PLN fortalecido y que represente a las grandes mayorías, un PLN por el bien común.
